Con un legado de ciento veintiún cuentos y treinta y seis novelas(varios adaptados al cine y la televisión, como por ejemplo en "BladeRunner", "El vengador del futuro", o "Minority Report"), Philip K.Dick se convirtió en un autor ineludible de la ciencia-ficción y laliteratura fantástica. Dueño de una sensibilidad única, supo anticipar como nadie el futuro en que vivimos, un mundo ya colapsado,atravesado por el control, el delirio y la falsedad, y que pide agritos ser "reparado". David Lapoujade, filósofo de profesión -que yaen "Ficciones del pragmatismo" y a propósito de los hermanos William y Henry James, supo surcar los canales que conectan literatura yfilosofía- se dedicó a leer la obra completa de Dick y a arrancar deallí nociones cruciales para pensar nuestro presente y devenir. Elpluriverso distópico que retrata Dick es un mundo donde no solo cabenmuchos mundos, sino que estos se interfieren de manera constante. Y es el "locus" anti-cartesiano por excelencia, ya que los tres principios clásicos de identidad, realidad y causalidad se derrumban uno trasotro, como un castillo de naipes. La