JORDAN
?l me acogi? cuando yo no ten?a donde ir. No me manipula, no me hace da?o, ni me ignora. Me escucha, me protege... ME VE. Pero mi coraz?n late demasiado fuerte cuando le oigo llegar a casa, o cuando me mira durante la hora del desayuno.?
Tengo que parar esto. No puede pasar.
Mi hermana me dijo una vez que no hay ning?n hombre bueno, y que cuando lo encuentras, no est? disponible. El problema es que no es Pike Lawson quien no est? disponible. Soy yo quien est? fuera de su alcance.
PIKE
La acog? porque pens? que podr ?a ayudarla. Pero a medida que han pasado los d?as, la situaci?n cada vez es m?s dif?cil. Tengo que dejar de pensar en ella todo el tiempo, no puedo contener la respiraci?n cada vez que tropiezo con ella por casa. Por m?s que lo desee, no puedo tocarla.
No podemos hacer esto.
Porque ella tiene diecinueve a?os, y yo tengo treinta y ocho. Y soy el padre de su novio. Por desgracia, los dos se han mudado a mi casa.