Perfecta combinaci?n de romance, intriga, pol?tica e historia ambientada en la Polonia de los a?os 80.En los a?os ochenta, Ludwik, un estudiante universitario polaco, inconformista y lector voraz, se ve obligado a asistir a un campamento de verano de agricultura. All? conoce a Janusz, un chico atractivo y despreocupado por el que comienza a sentirse fascinado, aunque el temor no le permite bajar la guardia. Un encuentro fortuito junto al r?o los conduce a una aventura intensa, excitante y absorbente. Aislados de la sociedad y sus restricciones, y unidos por un ejemplar ilegal de La habitaci?n de Giovanni de James Baldwin, ambos se enamoran profundamente. Pero en el mundo real les espera un pa?s cat?lico y comunista donde la pasi?n que comparten es inconcebible.El amor secreto entre los dos j?venes se ver? desafiado por sus diferencias ideol?gicas, en un esfuerzo por sobrevivir en un r?gimen al borde del colapso.LO QUE LA CR?TICA DICE de NADAR EN LA OSCURIDAD'Conmovedor (?) los lectores que disfruten de esta impresionante obra esperar?n con ganas el siguiente libro del autor. Muy recomendable a quienes les gusten las historias de amor en las dificultades m?s adversas' (Library Journal)'Deslumbrante (?) los lectores disfrutar?n de una una prosa inolvidable que se aproxima a la maestr?a de Alan Hollinghurst' (Publisher Weekly)'El lector puede imaginarse un Ll?mame por tu nombre ambientado en Polonia durante el comunismo y se har? una idea de c?mo es el conmovedor debut literario de Jedrowski sobre una absorbente historia de amor en un pa?s dividido' (O, The Oprah Magazine)'Una de las novelas gais m?s sorprendentes que hemos le?do jam?s. Nadar en la oscuridad es extraordinariamente hermosa (?) Er?tica, hipnotizante, desgarradora y brutal. Es una obra maestra' (Attitude magazine UK)'Un romance conmovedor e inusual con un trasfondo pol?tico (?) Jedrowski escribe con elegancia y evoca primero una honestidad emocional en la que prosperan los amantes, para detallar despu?s la opresi?n del Partido Obrero Unificado Polaco' (The Guardian)