La inspiración suele entenderse como la presencia de un influjoextraordinarioen la creación artística, como un elemento misterioso directamentevinculado al carácter perdurable de la obra tocada por este hálitotrascendente. Además, la capacidad de la música de ahondar en esteámbito elevado, asociado a la divinidad, impulsa la obra artística ala categoría de revelación: ya era esta la intención última de losaedos de la antigüedad, y quizás también la ha sido para grandescompositores que, como Bach, Beethoven o Brahms, escribían conscientes de tocar con su arte los resortes de la intimidad humana yvigorizarlos. Como decía George Steiner, la música es la teología delos que no tienen ningún credo formal.En este ensayo, el musicólogo y cantante Josep Maria Gregorireflexiona sobre la relación íntima de la música con la inspiración,la sacralidad y el pensamiento simbólico. Y lo hace sumergiéndose enla experiencia trascendente de la creación de algunos grandescompositores, transmisores del vínculo que une el mundo humano y elarquetipal. Estudia el relato platónico de la armonía de las esferas y analiza su aplicación a los mitos de las sirenas y las musas. Porúltimo, se adentra en la figurade Orfeo y en la obra que Striggio y Monteverdi le dedicaron, ypropone un análisis afinado de este hito musical que conjuga sonido,número y palabra como expresiones de un único verbo.