Tal vez sea Ronda el lugar m?s adecuado para contemplar Andaluc?a a vista de p?jaro. En las correr?as que hice por la regi?n cuando acopiaba materiales e impresiones para mi Gu?a natural, fue Ronda algo as? como el lugar geom?trico de mis itinerarios. Bien conocido es el magnetismo de Ronda y yo no soy sino uno m?s de los que han sucumbido a ese magnetismo. El ?nico torero al que yo haya escrito un romance es Antonio Ord??ez, y la plaza de Ronda es la ?nica a la que le haya dedicado una oda neocl?sica. Cuando escrib? esa oda a su Real Maestranza, ya ten?a en mi haber la descripci?n, y la exaltaci?n, de su entorno en la mentada Gu?a natural, de suerte que en mi oda, sobre la descripci?n de la plaza desti?e la del paisaje en que est? engastada. Es ya t?pico hablar de la Ronda de Dor? y de la Ronda de Rilke, de la visi?n rom?ntica y la visi?n simbolista de un mismo prodigio. Entre una y otra extienden pintura y literatura una asombrosa escala crom?tica.
Aquilino Duque naci? en Sevilla el 6 de enero de 1931. Realiz? estudios jur?dicos en Sevilla, Cambridge, Reino Unido y Dallas, Texas. Entre sus novelas merecen citarse Los consulados del M?s All?, Los agujeros negros, La luz de Estoril y Las m?scaras furtivas (Pre-Textos, 1995). Es adem?s autor de libros de ensayo y de viajes. En 1993 public? su libro de memorias El rey mago y su elefante (Pre-Textos). Poes?a incompleta (Pre-Textos, 1999), que incluye el poemario in?dito Entreluces, recoge sus otros libros de poemas ya publicados.
Entre sus traducciones destacan la de los Poemas de Roy Campbell y la de Los Lusiadas de Luis de Camoens. En 1975 obtuvo el Premio Nacional de Literatura; de 1975 a 1979 fue secretario literario de la Colecci?n de Bolsillo en el Servicio de Publicaciones de la Universidad de Sevilla, y en 1981 ingres? en la Real Academia Sevillana de Buenas Letras. Vivi? en Ginebra y en Roma, como funcionario internacional, de 1961 a 1975. Actualmente reside en Espa?a.
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